sábado, 20 de diciembre de 2008

Nostalgia de un atardecer con P'ampapiano

Eramos los niños que saliendo del colegio en épocas de clausura nos encontrabamos derrepente con un Cusco desbordante de ternura -avéces tambien no me la creo, pero exíste y es maravilloso- por estas épocas el Cusco se transforma, hay mágia y encanto, salimos de las aúlas y corriendo nos dirigimos a pasar revista y constatar las novedades que para el niño Manuelito trajeron desde Puno, animalitos de todos los tipos y tamaños, santos, pastores, cisnes y pajaritos...Los Artistas cusqueños estan hacia otro lado de la plaza mayor, alli hay trabajos más elaborados y a los laterales estan los hombres de las alturas que bajaron con toda clase de yerbas y espinos para adornar el nacimiento. Qué ternura siente uno cuando niño al mirar tantas creaciones. Tanta belleza...
Todos los que somos de aqui tenemos por lo menos un niño Manuelito en casa, se recuerdan historias de una señora en la calle Hospital que tenía cuarenta niños de todos los tamaños y expresiones y todos muy muy antiguos cuya fiesta era el 6 de enero, tambien ese día hay fiesta en nuestro barrio, y despues las historias comienzan a brotar como de un manantial inagotable, la historia del niño de la espina, del niño de la Merced o niño Doctorcito , del niño de San Cristóbal, del niño de la mama Nati, del niño compadrito...Historias y más historias hasta quedar extasiados, un sinfin de cuentos propios de un pueblo capaz de crear vida y ensueños, asi sentimos nosotros la llegada de la navidad, pero no cualquier navidad, sino la navidad cusqueña, la navidad en Cusco. Despues de ver las novedades de los comerciantes del altiplano que se apostaron al derredor de la plaza mayor nos apresuramos para escuchar el P'ampapiano del señor Pinto y del señor Rozas , corremos a San Blás, los niños de este barrio al sentir nuestra presencia se alteran y resuelven echarnos fuera, es lógico, estan en su casa, la casa se hace respetar, aún asi les hacemos la lucha, comienzan los intercambios de pedrones, puñazos y puntapies -y todo esto días antes de la navidad- ¡ imagínense!, logramos entrar, algo maltratados pero adentro, gran afrenta a los sanbleños mas el pampapiano del señor Pinto vale la pena, es un sonido...¡Ay! que música. El domingo será la adoración de los reyes y la degollación de los santos inocentes -avisa un compañero de aula- sí!. Contesto entusiasmado y con un extraño fulgor en los ojos, un fulgor que desde esas épocas o quién sabe antes de nacer ya estaba conmigo y estara hasta el final de mis días.
Acordamos todos asistir despues del almuerzo, la adoracion comienza al promedio de las dos de la tarde, pero como hay rivalidad entre nuestros barrios y unos días antes estos nos causaron no pocos dolores ahora nosotros tenemos el deber de manifestarnos en la escenificación de los sanbleños (jajajaja) entonces baldeamos con agua mezclada de aceite algunos trechos de la calle enlajada Chokech'aka (la frontera como la llamamos) justo por donde tienen que pasar los reyes magos montados en sus caballos, los adoquines de la calle estan como pasadas con cebo, nosotros esperamos aparentemente distraidos con la expresión más inocente que puedan imaginarse y aparecen los reyes magos, retrasados y apurando el paso cuando de pronto el caballo de Baltazar se revienta el lomo con el ginete encima y este queda totalmente arruinado, Baltazar saca su látigo para propinarnos unos cuantos chicotázos pero en el intento vuelve a caer haciendo estallar nuestar alegrías y no le queda más que tratar de levantarse. Nosotros felices -¡ahora sí!- vámos a la plaza San Blás para ver la adoración de los reyes magos y la degollación de los santos inocentes, en el balcón de la esquina entre la cuesta y la plaza de San Blás esta el esclavo negro Cingo , Cingo! Cingo! grita el anciano emperador Herodes y el fantoche que acostumbra colgarese de los balcones fanfarroneando y demostranto pericia derrepente se pierde en el vacio de nuestras atentas miradas... Resulta que una de las piezas del corroido balcón se desprendio y el esclavo Cingo aparece encima de unos cuantos soldados romanos y el rey baltazar ahora más arruinado que antes, todos los asistentes que debajo miramos estallamos en risas y solo después llega la ayuda para el desdichado Cingo que es trasladado hacia la posta de la parroquia , en frente hacia la puerta del templo esta el tabladillo, y al compás de los villancicos cusqueños comienzan a ofrecer su coreografia los pastorcitos con un tremendo Angel en medio, los pastorcitos son niños que bajan de las comunidades de San Blás y bailan con alegría envidiable...La plaza esta abarrotada, al otro lado del templo estan nuestros padres y abuelos totalmente distraidos, total ellos ya vivieron esas experiencias en sus épocas, ahora hay Chiriuchu y cerveza y chicha y chicharrones y frutillada y golosinas con el inconfundible fondo de los villancicos cusqueños cuando derrepente todos salen de su letargo dionisiaco para mirar hacia el tabladillo, el momento esperado a llegado; un silencio sacro toma la plaza, los soldados romanos arrebatan a las mujeres las muñecas que hacen de recien nacidos waltados y con sus espadas de palos los parten en mil pedazos, aparece un extraño dolor parecido al placer cuando nos toca presenciar una masacre de hace dos mil años y los soldados tienen un cierta expresión en el rostro cuando realizan la escena, los abuelitos más antiguos se conmueven hasta las lágrimas y gritan: Ayyyy!... Maldito herodes... Ya los han degollado a los santos inocentes, y poco rato despues vuelven y estallan en una alegría que va de la mano con la esperanza... Hay la confianza de que el niño nacera a pesar de todo.
Ahora los pastorcitos bailan al compás de la nostalgia de un atardecer con P'ampapiano, todos recobran la conciencia y vuelven a comer y beber, asi llega la noche, los reyes magos estan brindando con algunos vecinos junto a la orquesta de navidad, Herodes desapareciendo por una de esas callecitas de San Blás -Carmen bajo recuerdo- con su camirar serpenteante como queriendo sortear la embriaguez, nuestros padres y abuelos beben recordando sus vivencias y contandose historias relacionadas a la época pero ya con los padres sanbleños que antaño intercambiaron tremendas contiendas para imponerse ante sus contanporaneos de San Cristóbal, ahora ya estan juntos, son adultos y comparten, es noche y todos corremos y jugamos en toda la plaza San Blás junto a los niños que horas antes tanto nos habian hecho sufrir para entrar en su barrio, los niños de Santa Ana que también están presentes nos dicen que el 2 de Enero en el Corpus del Señor del Cabildo es más hermoso y que sus altares son los más altos del Cusco y que el nacimiento de su templo es el más grande, nosotros los desmentimos pues nuestros altares son los más altos sin afán de jactancia y además en nuestra fiesta hay dos, jajajaj ¡sonsos! les decimos, más altos que el mismo templo...Los de Santiago y Belén estan aparte y ya se nota que traman algo con los sanbleños para el 6 de Enero. Esta acogedora y templada plaza ya huele a estas horas a riquisima cerveza -esa vez cerveza de Cusco- ya no hay orquesta con P'ampapiano solo una cinta que suena ida y vuelta, nosotros pasamos el tiempo haciendo reventar cuetecillos en las manos o tirandolos a la pileta del centro, otros más temerarios traen bomba piedra y de rato en rato un sonido atronador perturba a los distraidos dipsómanos...Todos somos familias, las mismas nos encontramos cada año, con los que hay cariño y con los que hay rivalidad y con los que hay compromiso, a los neutrales ni se les toma atención, algunos levantan mesas y se retiran, se van cantando y bailando k'aswas de villancicos, por Carmen Alto, Suyt'ukatu y la cuesta, mañana hay que armar los nacimientos en cada casa, nietos y abuelos van de la mano, acordamos encontrarnos en el santurantikuy que sera el mismo 24 de diciembre en la plaza mayor del Cusco, el grupo se va debilitando poco a poco, y solo quedan los "inmortales" que nos retiramos cerca a las doce de la noche, la fiesta todavia tiene para un par de horas pero en casa, hay que preparar el ánimo y el corazón para recibir al niño Dios, dicen los mayores. La adoración de los reyes magos y la degollación de los santos inocentes es una escenificación teatral que se lleva a cabo en la plaza de San Blás a iniciativa del famoso padre Palomino y del señor Rozas Zurita desde el año 1913.
Ahora con mis 25 años de existencia mirando a los niños apretujados en las cabinas del internet o en las grandes jugueterias de productos importados, siento gran nostalgia, será porque los niños de ahora -no todos por cierto- y los que vendrán ya no tienen ese entusiásmo de esperar aquella navidad llena de humanidad donde no prima el afán de regalar a diestra y sisiestra sofisticados presentes...Un buen número de los niños de hoy son más indiferentes, será porque ellos ahora tienen otros estímulos aunque artificiales que los condena a no conocer ni sentir lo que no hace mucho sentiamos nosotros...¡Huffff.
La proxima fiesta sera el 6 de enero, esta vez en San Cristóbal y los niños de San Blás seguramente haran justicia y asi damos fin a las navidades en nuestro Cusco, iniciandolo los sanbleños, recibiendolo el Cusco entero y culminando los cristobalinos, ¡el 6 de enero es más bonito! vociferamos saliendo de San Blás ya muy entrada la noche. ¡Vamos a verlo en el Santurantikuy! contestan quién sabe que sombras al fondo de la cuesta que esta como desapareciendo en la penumbra de una tierra, complicada, maravillosa y enloquecedora.
La navidad cusqueña la que vivimos nosotros cuando niños. Cuando el Cusco se torna más acojedor que de costumbre, y muestra el sendero hacia sus más profundas entrañas .

Mijail Octavio.

12 comentarios:

Anónimo dijo...

Ya, pero explica que es un pampapiano?, que es un niño manuelito?..ah la ultima parte de novela.."amigos y rivales" jajaja

G. C. Thobalino dijo...

Excelente relato que evoca nostalgicos recuerdos con sabor a dulce; no solo esta bien hecho si no que logra crear un clima propio capaz de atrapar al que lo lea, y mas, si se le lee con algun nudo en la garganta que desenrrollamos suavemente, sin gritos, solo con un recuerdo de alguna perdida fotografia que cada vez se nos hace como un hermozo dibujo.

Pese a que no creo en la navidad ni un centimetro, un relato asi es de mucho apreciar; felicitaciones.

Atentamente:
G. Thobalino

Anónimo dijo...

DE: GABRIEL FARROÑAN
logicamente y con razón el entusiasmo, la alegria, la emocion y las utopias infantiles son mucho mas intensas cuando uno vive ese lapso; es decir la conciencia infantil esta despoblada de preocupaciones, odio, envidia, engaño-en la mayoria de los casos,sino en todos- lo cual reviste, para la concepcion de un niño, inconmensurable esperanza y el mundo, es decir nuestro mundo es el unico que existe. Pasaran los años y con estos tocaran la puerta de nuestra conciencia y afloraran muchas circunstancias y sentimientos de los que antes nos preciabamos y dabamos gracias al cielo que aun no habian corropido nuestro ser. La navidad, querido octavio, en cualquier lugar del mundo es una injusticia aun mas grande que la pomposidad con la que la celebran los cristianos. Mejor fiesta que esa fue la que vi en mi tierra-Paucartambo-cuando por tradicion familiar me dirigia al templo, en medio de una calle poblada con sabor a desolacion y entre sobras, a eso de las 11 de la noche, logre por descuido e ignoracia mia ingresar a una casona antigua en la que un grupo de parroquianos libaban licor. Con esto quiero significarte que existen ciertas fechas que no son especiales sino por la elegancia, cuidado y magnificencia que le imprimen su aduladorees.Grande fue mi sorpresa, ya que ese momento me asalto a la memoria como un rayo de luz esta frase que en si colige todo mi comentario: FELIZ FALSEDAD.
Me gusta la atmosfera que recreas en el relato, esta buena; narraciones, aunue con mas nivel, de ese tipo hacia el maestro Uriel Garcia. Noto que hay una notable influencia.
Me causo no pocas carcajadas el la frase: letargo dionisiaco. jajaja

Anónimo dijo...

Q bacan esta tu relato, realmente el Cusco es magico y la navidad alli debe ser otra cosa en donde no se esta tan esclavisado con la comercializacion, los regalos y otras cosas artificiales; realmenmte buenaso, saludos desde blogcindario.

Atte

Anónimo dijo...

Q TERNURA!, AUNQUE ALGUNAS PALABRAS NOSE ENTIENDO MUY BIEN LO QUE QUIERES DECIR; OJALA VUELVA PRONTO A MI TIERRA AL TERMIBNAR MIS ESTUDIOS, MUY BUEN BLOG!

Anónimo dijo...

Que bueno que ya se hayan enlazado!, tu relato esta buenaso, de solo leerlo da ganas de irse a vivir al Cusco, recuerdo mucho de los niños Manuelitos, en mi casa teniamos dos, bueno se quedaron con mi tio alla, pero despues de leer tu relato realmente me emociona; escribes muy bien, agregame, pronto te pasare algo de Sabina, es que no se que paso con el archivo y con mi Space, pero ya volvere recargado

Ahh y muchas gracias por enlazarme a mi tambien, ya nos escribimos, y arriba el Arte!!

Atent:
Patricio

Anónimo dijo...

Yo no creo en la navidad ni en nada de eso, de hecho esta navidad la pase triste escuchando algo de dark ambient; no solo por su comercializacion sino porque es una tonteria eso del nacimiento de cristo y es triste ver que hay gente que ese dia no recibe nada.

Pero el relato esta bonito e interesante, quizas sea mas disfrutable pasarlo asi, debe ser asi en el Cusco.
ahh, el pampapiano no lo conocia averigue en internet, es como un organo en miniatura o algo asi no?, su sonido debe ser interesante a mi me gusta mucho el piano... saludos a este interesante enlace

Anónimo dijo...

Saludos desde Ayacucho!!, mis tios son cusqueños y la navidad es bella y diferente alli, ya ire alguna vez,
buen blog y escribes chevere;
ahh respondiendo a Muriel, el Pampapiano es un instrumento parecido a un organo pero mas pequeño, creo que es neto de los andes, aqui en Ayacucho lo escuche tambien, es muy bonito; cuidense ya les traere noticias desde la sufrida pero fuerte Ayacucho!!!!

Anónimo dijo...

Bacan tu relato, a ver si un dia me doy una vuelta por alla con la gentita.

Lila dijo...
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Anónimo dijo...

ojala vuelvas a escribir pronto...

Anónimo dijo...

si ojala vuelvas a escribir pronto